Aquí, descansando un poco, después de subir tantas escaleras!
También fuimos a la catedral. Era muy grande y sobretodo alta. En la cima de la catedral, había un campanario que siempre tocaba a la misma hora, a las 12:30 h. Para subir hasta el campanario había una escalera de caracol con cientos de escalones. Por una parte os lo aconsejo para ver lo bonita que es y sobretodo para perder unos kilillos. Mi tía y yo nos quedamos en el campanario porque queríamos estar ahí para cuando tocara la campana.
Esto es la plaza en Trujillo. Hicimos una visita corta antes de volver a casa.